En el año 2014 hemos visto el cierre temporal de Uber y comenzamos 2015 preguntándonos no sólo cómo acabará ese asunto legalmente, sino también de qué manera estamos abordando la llegada de aplicaciones de este tipo. Porque en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) lo tienen claro: ante la economía colaborativa, regulación la justa.
Una cosa es evidente, si pensamos que esto sólo va de taxis, nos equivocamos. Definamos como definamos la economía colaborativa, y sin olvidar que unas apps cumplen la ley y otras quizá no, lo cierto es que las distintas plataformas que se han autoincluido dentro de este epígrafe colaborativo afectan a muchos más sectores de los que pensamos. Algunos ya le están viendo las orejas a internet (el sector hotelero con Airbnb, el de transporte interurbano con Blablacar…), pero otros que se creen a salvo se las verán muy pronto.
La Mensajería es el próximo objetivo
Si tenemos que hacer una quiniela para apostar por el sector español que aún no se ha visto afectado por internet pero que lo hará más pronto que tarde, ese es el de la mensajería. Y quien primero podría mojarle la oreja es la propia Uber, cuyo modelo de negocio no se limita al transporte de pasajeros.
En Nueva York ya está disponible el servicio Uber Rush , que te permite contratar a un conductor de Uber para que lleve o traiga un paquete. Quizá Uber Rush no inquiete demasiado a las grandes compañías de mensajería, ya que se limitaría a entornos locales, pero sí podrá hacerlo Amazon. El gigante del comercio electrónico, que tantas alegrías proporciona a las compañías mensajeras con su incesante número de pedidos, podría prescindir de ellas próximamente. O, al menos, reducirles visiblemente la cuota de envíos.
Y es que lleva desde mediados de 2014 haciendo pruebas para lanzar e instaurar su propio servicio de paquetería. Una decisión que perjudicará al sector tradicional, pero que tiene toda su lógica: si eres el rey del comercio electrónico, ¿por qué no encargarte tú de los envíos?
Carry, la app que te paga por llevar objetos en tu maleta
Otra de las curiosas novedades que ha llegado hace poco es Carry, una plataforma que te permite ganar dinero si en la maleta de tu viaje haces un hueco a algo que una persona quiere enviar a otra persona que vive en la ciudad a la que vas. Los beneficios son evidentes: el que lleva la maleta se gana una propina por ejercer de transportista, mientras que el que hace el envío se ahorra el dineral de enviar el paquete por la vía tradicional.
El modelo de Carry en principio presenta algunas dudas, ya que no es lo mismo meter a alguien en tu coche (Blablacar) que llevar un objeto suyo en tu propia maleta. Pero, más allá de los viajes en avión (que quizá otorguen un mayor recelo para el transportista novato), habrá que ver su evolución en transportes terrestres.
Los supermercados y la compra diversificada
Los supermercados saben que, si hicieses una lista de la compra ideal, sería imposible que el 100% de los productos perteneciesen al mismo establecimiento. Pero también saben que eres vago, con lo que intentan copar el mayor porcentaje posible para que sólo vayas al suyo. Y si haces una compra grande, ellos te lo llevan a casa a cambio de un módico precio.
Este paradigma podría cambiar muy pronto, sobre todo si nos fijamos en el éxito que está teniendo en Estados Unidos InstacartSin embargo, este paradigma podría cambiar muy pronto, sobre todo si nos fijamos en el éxito que está teniendo en Estados Unidos Instacart, una plataforma que hace la compra por ti en todos los supermercados que quieras (pudiendo elegir varios) y se compromete a llevártela a casa en un máximo de dos horas.
No es un ataque frontal a los supermercados, ya que la compra se la hacen a ellos, pero sí a dos de sus claves de negocio: primero, la exclusividad de comprar todo solo en un establecimiento; segundo, que sea el propio supermercado el que cobre por llevarte el pedido. Pero Instacart no es la única compañía que va a luchar por hacerte la compra y llevártela a casa el mismo día. También podemos hablar de Google Shopping Express o Amazon Fresh, las iniciativas con las que estos dos gigantes ya están compitiendo en Estados Unidos y con las que seguramente puedan competir en nuestro país muy pronto.
Para la Banca también hay…
Unos y otros llevan un par de años queriendo matar a la banca a través del crowdfunding, ya sea el de recompensas o el de inversión. Es cierto que no parece que este sistema de financiación vaya a acabar con los bancos, ya que se dirigen a segmentos distintos, pero sí hay iniciativas que deberían preocupar medianamente al sector financiero. Entre ellas se encuentran las cada vez más numerosas plataformas de crowdlendingo préstamos P2P, cuyo volumen de negocio en nuestro país crece a un ritmo vertiginoso gracias a Comunitae, Lendico o Growly.
Pero no son las únicas: Kantox hace intercambio de divisas, peerTransfer te permite hacer transferencias a nivel internacional… en este caso, dos startupsespañolas que, si bien no compiten con los bancos en todo el esplendor de su negocio, sí luchan por quitarles parte de la tarta.
La realización de los pequeños trabajos: recados, chapuzas…
Podemos decir que la actual popularización de internet ya está afectando (y lo hará más cada día) a casi cualquier sector profesional que no requiera una gran profesionalización. Un ejemplo es el de las múltiples webs de recados que están surgiendo en España a nivel local e hiperlocal y que permiten ahorrar tiempo a los usuarios y ganar un extra a los recaderos.
Y si quieres un profesional que haga alguna de tus tareas o chapuzas domésticas, la startup española Etece te lo pone fácil. Aunque pronto podría tener una dura competencia: Amazon, que ya prepara un servicio muy similar
Fuente: El confidencial